sábado, enero 09, 2010

La bella durmiente…

Pasaba más de la mitad de su día durmiendo. Ya no pensaba en cultivar y darle significado a otras áreas de su vida, nada tenía prioridad…todo era la misma mierda pintada de gris. No había sueños, ni planes…no había motivos.

 

Por raro que parezca no todo había sido sufrimiento. Hubieron cosas que perdió y ganó en el camino, pero ya no le importaba, ¡no le habían enseñado nada!…simple y sencillamente se había abandonado a si misma, había dejado que la vida pasara sobre ella sin siquiera mover un dedo.

 

Para mucha gente era una actitud anormal, detestable, era algo que debía ser castigado, para otros, sin embargo, se trataba de una patología de la que debía ser ayudada cuanto antes. Los más comprensivos no obstante, preferían mantenerse al margen y no interponerse en su camino. Ella, a decir verdad, prefería a estos últimos.

 

Nadie la entendía, todos creían que lo que le estaba sucediendo estaba fuera de su alcance, pero en realidad lo estaba, lo había hecho a propósito e irónicamente esa situación la inicio en el mejor día de su vida, el día en el que se sintió la persona más plena sobre la faz de la tierra, el día que estuvo segura de haber encontrado el amor, de haber hecho lo que tenía que hacer, de haber dicho lo que tenía que decir, el día en el que sintió la mayor certeza de su vida decidió detener el tiempo, decidió congelarlo todo, intentó atrapar esos instantes y cerró los ojos.

 

Un día despertó para darse cuenta que había logrado lo que según ella deseaba, 40 años habían pasado ya desde que había tomado la decisión de atrapar el “instante pleno”, de quedarse con él y suspenderse en el tiempo.

 

Al abrir los ojos y salir de la cámara criogénica todo lo que alguna vez quiso apresar se marchitó instantáneamente. Pero no estaba muerto el mundo, simple y sencillamente había cambiado, lo viejo había muerto para dejar crecer a lo nuevo, pero ella en su calidad de antigüedad se encontraba en la primera categoría, en lo que debía morir.

 

Sintió el peor arrepentimiento de su vida al haber encontrado por fin y en esas circunstancias el significado de todo: la vida, el cambio, el poder compartirlo, la aventura de afrontarlo.

 

La mente humana por fin había encontrado la forma de retar lo divino, detener el tiempo, pero sólo para si misma, sin afectar a terceros.

 

Tal vez morir sea algo simbólico, que signifique solo cambiar de piel.

PD. Cuentan las historias de ciencia ficción que algún día el ser humano encontrará la forma de preservar viva a una persona en estado de criogenia, congelada, por décadas, por siglos.

Dejo una canción que hace poco me pasó un amigo  y de la que me gustó mucho la temática “Find yourself”.

 

4 comentarios:

JACQUEL (antes wrutuu88uu) dijo...

No mames memo... me describes a la perfección. No quiero despertar y darme cuenta que ha pasado tanto tiempo desde que morí.... ando bajoneada :´´(

Puta, esto me llego bien cabrón!!!... ya con calmita y cierto grado de alcohol en la sangre te podré contar. Besos

Psi-Lab dijo...

Que Jaqueline tan dramática! :P, que eso fue escrito para hacer sentir mal a nadie, el mensaje subliminal es que morimos a diario, que cambiamos a diario, y que aplazar ese proceso simplemente es sufrir al sentirse una antigüedad.

Ya sabes que te quiero y que estoy puesto para que nos contemos un chinguísimo de cosas, ya vendrán, de hecho te llamaré.

Saludos y Abrazo

liber dijo...

Que fregon te salio... si lo hubiera leído ayer sí me pongo a chillar, sería yo una "bella" durmiente... jeje

JACQUEL (antes wrutuu88uu) dijo...

me llamarás??... cuándo??